Comprar cosas junto con tu pareja.

Es un gran paso hacia adelante, no se engañen, requiere un compromiso social y afectivo serio con tu ser querido para llevar a cabo este proceso, especialmente si hablamos de compras grandes o muy caras. Finalmente es una responsabilidad entre los dos y tienen que estar completamente seguros al realizarlo.

Responsabilidad:

Pónganse de acuerdo y háblenlo entre ustedes, pidan consejos si es necesario, escuchen las opiniones de amigos y familiares. Claro que tómenselo con seriedad, no necesitan sobre pensar el comprar entre los dos una pizza o incluso un regalo.

Todo eso va a pasar en la relación desde temprano. Ambos invitarán las comidas o se las dividirán para compartir los gastos, tal vez los inviten a una fiesta de un amigo en común y aprovechan una de las muchas ventajas sociales de tener pareja, llevar un solo regalo.

Pero metiéndonos en el verdadero meollo del asunto, lleven el tiempo que lleguen en pareja podrá surgir eventualmente la duda, ¿compramos algo juntos?

Puede que lleven mucho tiempo en la casa del otro y hayan sido invitados a sentirse más cómodos, a hacerlo su espacio. Entonces deciden comprar un mueble entre los dos. Tal vez están en la distancia, juegan muchos videojuegos, sale uno nuevo que ambos llevan esperando mucho tiempo y se animan a comprarlo entre los dos, comparten cuenta y lo juegan entre ambos.

Sea cual sea la razón, deberán considerar en el qué pasará si terminamos. ¿Quién se queda con qué?, ¿se devuelve el dinero?, ¿lo vendemos y recuperamos lo perdido?

Compromiso:

Es por eso que se recomienda hacer estas cosas ya que se lleva un tiempo con la pareja y se tiene una relación estable y un compromiso serio. No vaya a ser la de malas que se compran algo y al día siguiente terminan por x o y.

Si es una ruptura tan abrupta inevitablemente habrá riñas entre los dos, no solo por cosas que sucedieron sino por lo que terminaron comprando.

Y eso que estamos hablando de objetos materiales, de cosas sin vida. No nos metamos en mascotas o animalitos, ahí si la cosa es distinta, mucho más seria. Si les interesa saber más del tema tenemos una entrada de blog anterior en la cual hablamos más al respecto.

Tengan la paciencia de hablar las cosas y dejar que estas sucedan al ritmo natural y orgánico de su relación, no a todos les pasa a la misma velocidad o tiempo. Cada persona es distinta al igual que cada relación. Podrán existir similitudes, pero nunca serán iguales.

Esperamos que estos consejos les sean de utilidad y que puedan tener relaciones estables y duraderas en donde los dos ponen de su parte para el bien común. La felicidad es algo que no puedes dejar de lado, es lo más importante y siempre debe estar presente.